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En un flash decidi empezar a contar desde 0... cerrar de una vez por todas la puerta lúgubre que mi inconsciente mantenía abierta. Ya es tiempo que deje de joder, deje de darme vueltas como ímbecil. Así que sacaré ese cd de su caja y lo haré pedazos en el lector... tocará tocará tocará y no se detendrá... exorcisará hasta la última esencia de los fantasmas que habitan dentro de mi cabeza. El alcohol no pudo borrarla, pero sí lo hará la música.
Entonces tirarse sobre la cama y dejarse llevar por la melodía, dejando que las cuerdas de una guitarra vayan licuando los recuerdos... sí... sí es posible... si a algunos les lavan el cerebro, cómo no voy a ser capaz de abrir una lavandería en mi propia cabeza.
Flash...
